Las fuentes de energía sostenibles deberían desempeñar un papel importante en nuestro sistema energético del futuro. Una fuente de energía sostenible que se está volviendo cada vez más popular son los automóviles eléctricos. Los coches eléctricos son mucho más silenciosos, más económicos y más seguros que los de gasolina. El principal inconveniente de los coches eléctricos es que tienen una autonomía limitada antes de que sea necesario cargarlos. Sin embargo, las nuevas baterías para automóviles están mejorando rápidamente y pronto harán de los automóviles eléctricos una alternativa viable a los automóviles que funcionan con gasolina.
Las baterías de los coches eléctricos son recargables y duran mucho más que las baterías de los coches normales. La batería típica de un automóvil eléctrico tiene aproximadamente el tamaño de una computadora portátil y contiene más de 300 celdas. Cada celda se compone de varias partes que se mejoran constantemente a través de la innovación tecnológica. Esto permite a los fabricantes mejorar el rendimiento y la autonomía de sus coches eléctricos sin tener que comprar coches nuevos ni sustituir los antiguos. Las baterías también tienen características de seguridad incorporadas para evitar que condiciones peligrosas provoquen que el motor deje de funcionar. Recargar un coche eléctrico también es mucho más rápido que cargar un coche de gasolina, ya que requiere menos energía. De hecho, algunas casas tienen paneles solares instalados en sus techos para que puedan recargar sus vehículos mientras están inactivos. En general, los autos eléctricos tienen mucho a su favor en lo que respecta a la sustentabilidad.
Actualmente, los generadores de energía de gas natural alimentan todos los autos eléctricos actuales y la contaminación y las emisiones de gases de efecto invernadero son los principales factores que contribuyen a estas emisiones. Tampoco hay huella de carbono por la fabricación de la batería del automóvil; en cambio, se produce en China utilizando carbón como fuente de combustible. Sin embargo, los gobiernos están promoviendo el gas natural como una alternativa a los vehículos que escupen emisiones de carbono mediante la construcción de infraestructura para la generación de gas natural. Esto significa que el medio ambiente se beneficiará aún más en el futuro gracias al aumento de la producción de automóviles en los países en desarrollo. A medida que estos países comiencen a utilizar fuentes de energía seguras para el medio ambiente, obtendrán una mejor comprensión de cómo usarlas de manera responsable en la fabricación de vehículos y electrodomésticos.
Los coches eléctricos son una perspectiva emocionante para el futuro del transporte sostenible, especialmente considerando su mayor duración de la batería y menor impacto ambiental en comparación con los vehículos actuales. Los fabricantes también están trabajando arduamente para reducir el proceso de fabricación mediante el uso de gas natural para la generación de energía en lugar de celdas de combustible que escupen emisiones de carbono. Sin embargo, hasta entonces, la naturaleza humana siempre nos llevará a usar algo nuevo por períodos cortos antes de volver a lo que funciona mejor para él.